domingo, 31 de agosto de 2008

DUDAS

Cuando el silencio ensordeció su vida, la inercia del tiempo se le hizo infinita.
La soledad caprichosa extendió un manto oscuro y fino, como un lienzo, sobre sus penas.

Recordó viejos tiempos, añoró y soñó. Quiso retroceder pero no pudo. En el suelo, encorvó su cuerpo, formando un ovillo y se sintió en el vientre de su madre, lo que hizo que vibraran todas y cada una de las fibras de su cuerpo. Su piel se erizó y, una corriente subió a lo largo de su columna vertebral desde la punta del cóccix hasta abrirse como un abanico en la base de su nuca. Se encontraba en el momento de mayor fragilidad: débil, quebradizo y absorto en un único pensamiento. - ¿Porqué no puedo ser feliz?-.

Toda su vida fue repasada momento a momento; deteniendose sólo al sentir algún bienestar, alguna sensación de alegría, para luego continuar recordando, poco a poco, año a año, cada segundo de su existencia, buscando el momento en el que se había equivocado, y llegando a la pregunta que muchos nos hemos hecho alguna vez-¿Debo continuar?-.

Él no tenía la respuesta pero sentía que pronto la conocería. Alguien se la traía, era un hombre; pero una lágrima que rodo sobre su mejilla hasta tocar sus labios lo distrajo, le hizo mover la cabeza. Aquél que traía la respuesta le dio la espalda y se alejó. Se detuvo un momento y giró, sólo para darle una mirada de desprecio; luego, continuó su camino.

De él sólo se escuchó un grito, gritaba ¡NO!, desgarrando a todo aquel que le oyó.

Sólo la sal de la lágrima en los labios le hizo recordar que aún vivía.

martes, 26 de agosto de 2008

EL CICLO

Nacer, crecer, reproducirse y morir. El ciclo de la vida. Lo miro y lo miro, una y otra vez y, no sé que será, pero le falta algo. No es suficiente. Y, entre etapa y etapa qué hago.

LA PUERTA

La Muerte no me inquieta. Es el cómo entrar en ella lo que me aterra.
22/11/2003

PERMANENCIA

Quisiera dejar en la vida, algo que dure más de lo que puede durar un hijo.

INOCENCIA

DESDE MUY NIÑO LE REPITIERON , UNA Y OTRA VEZ, QUE TENÍA QUE SER BUENO, Y ÉL SE LO CREYÓ.

IRONÍA

Con la ventana abierta de la habitación, era imposible evitar
que la luz del sol se reflejara en la careta que se encontraba en
la mesita de noche.
El reflejo le producía la visión de una sonrisa de complicidad.
Sentado en la cama, con su mano, interrumpía el
rayo de luz, intermitentemente, para ver como
la sonrisa iba y venía. Cogió la careta, se la puso,
y se miro al espejo.
Con la máscar puesta, y frente al espejo, pudo ver por primera vez,
en la profundidad de sus ojos, un enorme vacio. Se quito la careta.
fue la última vez que lo hizo.

viernes, 22 de agosto de 2008

DESEOS

ANOCHE, MIENTRAS DORMÍA
MI ALMA VOLÓ A TU ENCUETRO
TE ENCONTRÓ EN TU CAMA
TU CUERPO DESNUDO
Y ABSORTO EN UN ÚNICO PENSAMIENTO


SOPLÉ SOBRE TU FRENTE
TE INCORPORASTE Y TE SENTASTE AL BORDE DE LA CAMA
ME MIRASTE SIN VERME
ME INTUISTE SIN SENTIRME

TE MEROSO POR MI IMPRUDENCIA, REGRESÉ
Y HOY ME PREGUNTO EN QUÉ ESTARÍAS PENSANDO
NO LO SÉ
PERO DESEO SABERLO